
El artículo de hoy aborda la configuración (normativa y acomodaticia, incuestionablemente heterosexual y quizá ingenuamente victoriana) que Freud concluyó más adaptativa en la elección de parteneire.
Amados buscando amados en un extraño baile de máscaras.
Ya os adelanto que esta serie de artículos se complementará con el próximo concepto relativo a la elección de objeto, el que abordará la vía narcisista.
Hasta entonces, la segunda parte:
1 comentario:
¡¡Sí señor, como la vida misma!!. ¿Qué sería de nosotros si no le pusierais nombre a lo cotidiano?... ..mmmm.. a ver déjame pensar...
Yolanda Jiménez Rubio
Publicar un comentario